Guille

Estoy segura que estos últimos 8 años, es más probable que haya dicho con más frecuencia la palabra onomatopeya (pa decir algo raro),que la palabra papá, así que esta relación de parentesco ha sido bien lejana para mi este último tiempo

"Patrón", "figura paterna" "the father factor" , son algunas de las palabras para describir la importancia de un padre para el desarrollo de los hijos, y es cierto, es muy importante.
Algo que en mi historia familiar se conoce bien poco;Mi abuelo conocío a su padre a los 18 años , mi abuela vivió con su padre hasta como los 5 años. Mi mamá conoció a su verdadero padre a los 30 años. Yo he visto a el mio como 9 o 10 veces en mi vida y mi hija al de ella, una cantidad similar. Parece pa teleserie.. y tengo claro que si tuviera aptitudes literarias ganar�a mucho dinero escribiendo la novela de los Vidal.

Cuando llegué a los brazos del padre que Dios puso en mi camino, mi abuelo materno, debe haber sido el lugar mas grandioso en el que he estado. Claro! Es imposible que tenga memoria de eso, porque tenía días de nacida. Lo único que se es que desde el 26 de diciembre de 1978, cuando llegué a vivir con él disfruté de al máximo.


El me paseó en brazos, me dio mamadera, me hizo dormir, me iba a dejar en brazos al jardín. Me entregó lo que necesitaba y lo que no tanto. Cada vez que le pagaban me traía uno de esos chocolates que tra�an muchos animalitos en el envase.

En el invierno ibamos a recoger castañas o cualquier otra cosa que nos sirviera para reparar (desde ahí que todo lo que pillo me sirve pa algo). Después de cocerlas me daba en un platito chico, y si yo no podía pelarlas, lo hacía él por mi. En septiembre salíamos a recoger flores y cuando terminaban las ramadas del estadio ibamos pa ver que había quedado y siempre nos encontrábamos plata.

En el verano íbamos a los paseos a Yumbel que organizaba mi tio Raúl, y ahí me enseñaba a flotar y según yo ya estaba nadando.
Siempre me hac�a limonadas y jugos extra?os, mezclaba las bebidas y se mor�a de la risa.

Recuerdo sus manos partidas , sus uñas con rayitas y sus improvisados parches.

Tenía un monedero con hartos broches, del que me surtí muchas veces para comprar golosinas a media tarde. Este monedero, que lo mas probable es que lo hubiese echo él, asi como las innumerables cosas que fabricaba, entre ellos un anillo hermoso que todavía conservo y es lo mas valioso que tengo materialmente

Tenía también un llavero con forma de pelotita amarillo con rojo que adentro tenía un versículo de la Biblia.. Llaves que guardaban muchos de nuestros secretos.
A veces me llamaba y me susurraba en el oido "te tengo una cosita, acompáñame".. y subíamos calladitos y en puntillas sin que mi mami Rosa se diera cuenta. Cuando llegábamos a la pieza abría su cajonera, de esas antiguas (con la que me quedé y restauraré en mi casa) y de ahí sacaba una bolsita de servilletas, adentro hab�a un papel, lo desenvolv�a cuidadosamente y sacaba algún reloj, unos aros , un anillo o cualquier cosa que yo recibía como si fuera la joya mas preciosa del mundo. A veces eran cosas que por mi edad era imposible que las usara, aros largos como de gitana o relojes grandes de hombre.

También me enseñó a comer manzanas con cuchara, a como respirar cuando se trota o corre, a anudarme los zapatos, a hacer nudos de corbata, a llenar puzzles del diario y a dibujar caras de personas

Recuerdo también una conversación en el living de la casa, cuando el me decía que estudiara inglés, para que trabajara en Lan Chile, porque esas !jovencitas viajan harto! y asi te casai con un gringo jijiji". Otras de nuestras conversas eran bajo del parrón del patio, donde me contaba historias y anécdotas de la mina schwager o de la machasa.

Tenía los ojos color miel y una mejillas levantadas, producto de tanta risa. Usaba jockey, y una bufanda blanca "como Alessandri" decía él.
Le�a harto, novelas,la colecci�n entera de Icarito que hab�a en la casa y le libros sobre los presidentes de Chile.
Tenía poquitos dientes y los que ten�a estaban bien separados.
No era tan alto, porque caminaba encorbado, pero a mi me parec�a que era un gigante.
Le gustaban las adivinanzas y se sabía millones, igual que chistes y canciones que le contaba con picardía a mis primos, pero s�lo a los hombres.

A los nietos les dec�a marineritos. Pero a la Ferni, desde que supo que la ten�a en mi watita le dijo Rosaisela, por una ni?ita de una novela.

Siempre estaba haciendo algo, en el patio, en la leñera, en la huerta, plantado, regando o sino haciendo unas mezclas raras de huevo con cebolla y otra cosa que se llamaba zanco, que nunca cach� que era.

Le gustaba ver "las peleas" de boxeo y siempre gritaba "échale échale" o sino las películas del "chaslon jeston" o los "magnéticos" (los magníficos) , su personaje favorito era el "ñurdok". Era weno pa ver tele, en eso siempre lo acompa?aba yo.

Tenía como mil sobrenombres, le decían Schwager, Polera, Guille, Willy �.buu y muchos otros que ya no me acuerdo. El a mi mamá le puso "boloca", porque ella le hizo un tremendo berrinche pa que comprara un televisor Bolocco cuando recién aparecieron los televisores.

Cuando viví un tiempo con mi mamá, el se levantaba temprano y nos iba a dejar el pan, o cualquier cosa rica. También me defendió cuando mi mamá me castigaba...castigos que no eran muy suaves y también luché cada vez que a mi mamá se le ocurr�a sacarme de la casa y llevarme a vivir con ella.

Sabía cocinar, lavar, planchar, hacer pan, sopaipillas, todas las labores dom�sticas, las que sus hijos aprendieron m�s que sus hijas. Las mujeres de mi familia cocinan muy mal las mujeres!

Mi abuelo, mi papi Guillermo, nunca se sentó conmigo a darme una lección, a enseñrme alguna matería, porque él se encargó de enseñarme otras cosas ...ejemplos de grandeza, de bondad y sobretodo de capacidad de perd�n. Fue siempre un hombre amado por todos los que estuvieron a su alrededor. Sus colegas, sus vecinos, nueras, yernos y nietos. Era de esas personas que pase lo que pase, sea como sea, sabes que contar�s con ellas.

Cuando no tengo �nimo y me siento desesperanzada, me acuerdo de nuestra última conversación, cuando el me prometió que jamás me dejaría sola, que aunque se muriera me estaría acompañando a mi y a mi "marinerita". Que �l sab�a lo que era no tener pap� y por eso hab�a querido ser el mio y le dijo a mi mam� que me dejara en esa casa. Tambi�n me dijo que nunca dejara a mi hija, que siempre estuviera con ella, porque sólo me tenía a mi y que Dios se encargaría de que nunca me faltara nada. Y as� ha sido.

Muchas veces pienso que lo defraudé que me hubiese gustado que estuviera sentado en el público cuando me titulara de la universidad, así como asistíó a todas, absolutamente a todas mis lincenciaturas, presentaciones de gimnasia y folclor. Que fuese él quien me llevara orgulloso del brazo cuando me casara de blanco, con cara de "tarea cumplida", también haberle contado con alegría y no con verguenza que estaba embarazada, y haberlo invitado a comer a mi casa propia. Siento que hice cosas que lo hicieron feliz, pero que me faltaron tantas por hacer mientras estaba vivo. Siempre me voy a sentir en deuda

Nadie se pudo explicar porque sufrió tanto, porque se enfermó tan terriblemente de ese c�ácer que lo hizo morir. La mayoríaa esperaba que mi abuela se muriera primero, todos lo queríamos eternamente con nosotros. Entendíamos que ya estabas viejito, que a tus ochenta y dos añs ya poco podíamos hacer.
Mi papá era la persona que más amaba en el mundo y a veces pienso que Dios hizo que naciera la Ferni justo antes de perdelo , as� todo el amor que le tengo quedar�a en buenas manos y se lo traspasara entero a mi hija.

No pude sujetarle la mano cuando le dolía vivir, porque no quise, porque no lo asumía, porque me dolía verlo sufrir, cosa que justifiqué con "el trabajo y la Ferni no me daba el tiempo" fue la mejor excusa que se me ocurrió , pero la verdad es que me negaba a perderlo.
Se que desde el lugar que esta ahora sabe que he tratado de imitar su ejemplo, en lo que pueda y como sea y que por sobre todo que lo quiero con toda mi alma y que siempre va a estar en mi coraz�n, eternamente.

Me hubiese gustado que mi hija lo hubiese conocido, porque conocer a personas como mi padre entregan esperanza de que el ser humano puede ser tan bueno como quiera serlo y mi padre irradiaba bondad en cada acto.

Te amo y te extraño mucho papá. Feliz D�a!